
Si tu hijo tiene fiebre puedes:
Quitarle ropa.
Darle a beber líquidos abundantes.
Alejarlo de focos de calor.
Humedecer la piel con paños de agua o bañarlo.
La forma adecuada de bañar a un niño con fiebre es:
En una habitación en la que no haga frío, preparar agua a la temperatura que tenga el niño menos 5ºC, e introducir al niño en el agua durante 15-20 minutos, de forma que conforme baje la temperatura del agua, baje la fiebre. No conviene usar agua fría, porque bajar la fiebre de golpe no es bueno.